Sé que realmente esto no es lo que esperáis leer, pero yo necesitaba compartirlo y escribirlo. Igualmente espero que os guste y perdonad por no estar más activa.
Aún recuerdo las angustias que trajo septiembre consigo, todo desordenado, nada planeado.
En dos semanas empezaría las clases en Valencia y aún no tenía donde asentar la cabeza durante el curso que me esperaba, todo ello me abrumó, dejar la gente a la que quería, mi ciudad. Pero supuse que merecería la pena.
Ahora estamos entrando en noviembre y no hay oportunidad que haya tomado de la que esté más orgullosa.
Todo ha estado por encima de mis expectativas, la ciudad, la experiencia, la gente, el curso. Realmente me está encantando todo esto que estoy descubriendo. A nivel formativo también.
Ha ayudado mucho que me haya sentido arropada desde el primer momento y doy gracias por ello. Tiendo a coger cariño muy rápido a la gente así que ya sabéis lo que siento.
Y tan sólo han pasado dos meses desde que todo esto empezó me alegra saber que queda mucho más por delante, pero a la vez me entristece ver lo rápido que se pasan los días.
Espero que me leáis en la siguiente, os quiero ;)
