There.

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miércoles, 30 de septiembre de 2015

REFLEXIONES IMPROVISADAS 10

Ya he vuelto, después de un tiempo en el que no he encontrado el momento ideal para escribir por aquí, aunque si que seguía haciendo mis propias micro historias para mi misma.

El tema de esta semana son los prejuicios.

Me gustaría hablar de esto ya que recientemente me ha pasado. Juzgar a alguien no es bueno las apariencias engañan en la mayoría de los casos.

No creo que sea de recibo pensar algo sobre una persona y menos aún contarlo por ahí cuando no conoces a la otra persona, ni sabes como es en realidad ni como actuaría ante ciertas situaciones.

Porque una persona tenga un físico determinado no quiere decir que tenga que ser como eso te hace pensar que es, todo el mundo entiende a lo que me refiero, todos hemos prejuzgado a alguien, muchas veces nada más ver a alguien un montón de pensamientos corren por nuestra mente, yo también lo he hecho, pero he sabido guardarmelo para mi interior pensando que igual esa persona no es así y yo me he equivocado, doy una oportunidad, y sí que a veces lo he exteriorizado, pero tengo que admitir que a ciertas personas, si no es a todos les haría bastante daño oír aquello que estás compartiendo.

No estoy dando lecciones a nadie, ni mucho menos, ya que yo también lo hago es algo que al principio no podemos remediar, pero podemos dar oportunidades para llegar a conocer a la persona en cuestión.

Debemos intentar juzgar en menor medida, ya que no es sano, no nos ayuda para formarnos como personas ni para nada más, simplemente sirve para crear rivalidades, que quizá en algunos casos los juicios son exactamente como resulta la realidad y es mejor haberse mantenido alejado de aquellas personas, pero la mayoría de veces los juicios no se corresponden con la realidad, ya que una persona a la que le guste jugar con la gente no llevará un cartel en la cabeza, ni otros muchos casos.

Hasta aquí la publicación de esta semana, a disfrutar.