There.

domingo, 10 de enero de 2016
MATUMAINI
miércoles, 6 de enero de 2016
FELIZ AÑO 2016 Y FELICES REYES
No es una entrada normal, escribo para deciros que siento haber estado sin escribir por aquí durante tanto tiempo, pero estos meses he estado más unida a la escritura que nunca.
He tenido tiempo para trabajar en una novela nueva, voy a un taller de escritura que me ayuda mucho, he ido a charlas con algunos escritores españoles y así he aprendido qué nuevas cosas puedo contar y tengo nuevas ideas para el blog.
Siguiendo la temática de las reflexiones improvisadas tengo muchas ideas para reflexionar sobre ellas aquí con vosotros o simplemente cosas que forman parte de mi vida que os quiero contar.
Mi propósito de año nuevo es unirme más a este blog y ser más persistente con él.
Siento que este curso me he cargado con muchas cosas y a consecuencia de eso estoy dejando otras de lado, como el blog, y es algo de lo que me arrepiento, así que este año espero concentrarme algunos ratos en daros lo que necesitais.
Y por último ya se que somos pocos, pero gracias igualmente por estar ahí.
Este es vuestro regalo del día de Reyes, más entradas en el blog durante todo el año, sólo quiero decir que si alguna vez no me siento bien escribiendo no lo hare porque no quiero que se convierta en una obligación para mi, así que esperadme pacientes.
Gracias y feliz año.
jueves, 5 de noviembre de 2015
2 AÑOS 📝
Este es mi mundo, mis reglas, mis personajes, mis escenas, mis sentimientos, mi forma de plasmarlos.
A través de la escritura puedo evadirme de mis problemas e inventar un mundo en el que las cosas sean como quiera, en el que existan los dragones y las princesas sin príncipe azul, o simplemente en el que existan personas normales, pero en otras condiciones. Me gusta cambiar la realidad y poder hacerlo a mi manera, nada malo pasa, o sí, pero yo lo manejo, yo decido cuando empieza y cuando acaba.
Invento realidades ocultas, personajes sinceros, o no, gente que me gusta y otros que no tanto, pero pasa con ellos lo que yo diga, es mi pequeño mundo en el que me puedo refugiar, pero no huir de mis problemas o de los problemas del mundo.
Un sitio perfecto, o no.
Pueden pasar cosas imposibles, o casi, pero allí parecen tan coherentes que le dan vida, puedo refugiarme en los personajes y sus sentimientos, sentirme identificada con ellos, quererlos o odiarlos.
Es una sensación que se que sólo esto me la da, algo que no puedo obtener de otra forma, como mi droga, mi perdición, sana supongo.
viernes, 16 de octubre de 2015
REFLEXIONES IMPROVISADAS 11
La semana pasada no encontré el momento ni el tema para escribir, pero esta vez estoy de vuelta.
Este tema es uno de los que llevo queriendo hablar hace tiempo, mucha gente no estará deacuerdo con mi opinión, pero simplemente es eso, mi pensamiento.
El tema de esta semana es el alcohol.
Todo el mundo alguna vez en nuestra vida hemos bebido, pero nunca llegaré a entender a esas personas que tienen que beber y sentir esa sensación, ese punto para poder estar de fiesta y puede que para conocer gente, no lo estoy criticando, lo respeto, cada uno hace lo que quiere con su vida.
Pero pienso que es el alcohol el que te hace comportarte tal y como lo haces en ese momento y que por ello no eres tu mismo, es como si alguien te estuviera manejando y si realmente no aprendes a sociabilizarte sin la ayuda del alcohol hay un problema, pero eso como digo no me incumbe cada uno vive su vida como quiere.
Es como depender de alguien para poder divertirte y estar de fiesta con tus amigos, claramente a veces yo lo he hecho, pero no dependo de ello, eso es a lo que me refiero, tener que hacerlo siempre que sales de fiesta, o que la noche no tenga sentido sin el alcohol, la verdad es que los momentos son más intensos y verdaderos sin el efecto del alcohol, o al menos en mi opinión.
Simplemente quería expresarme ya que es algo que llevo mucho tiempo queriendo hacer, espero que nadie cambie la forma de verme sólo por esto, como digo es mi opinión y no me hace una persona rara por ello, simplemente diferente.
miércoles, 30 de septiembre de 2015
REFLEXIONES IMPROVISADAS 10
Ya he vuelto, después de un tiempo en el que no he encontrado el momento ideal para escribir por aquí, aunque si que seguía haciendo mis propias micro historias para mi misma.
El tema de esta semana son los prejuicios.
Me gustaría hablar de esto ya que recientemente me ha pasado. Juzgar a alguien no es bueno las apariencias engañan en la mayoría de los casos.
No creo que sea de recibo pensar algo sobre una persona y menos aún contarlo por ahí cuando no conoces a la otra persona, ni sabes como es en realidad ni como actuaría ante ciertas situaciones.
Porque una persona tenga un físico determinado no quiere decir que tenga que ser como eso te hace pensar que es, todo el mundo entiende a lo que me refiero, todos hemos prejuzgado a alguien, muchas veces nada más ver a alguien un montón de pensamientos corren por nuestra mente, yo también lo he hecho, pero he sabido guardarmelo para mi interior pensando que igual esa persona no es así y yo me he equivocado, doy una oportunidad, y sí que a veces lo he exteriorizado, pero tengo que admitir que a ciertas personas, si no es a todos les haría bastante daño oír aquello que estás compartiendo.
No estoy dando lecciones a nadie, ni mucho menos, ya que yo también lo hago es algo que al principio no podemos remediar, pero podemos dar oportunidades para llegar a conocer a la persona en cuestión.
Debemos intentar juzgar en menor medida, ya que no es sano, no nos ayuda para formarnos como personas ni para nada más, simplemente sirve para crear rivalidades, que quizá en algunos casos los juicios son exactamente como resulta la realidad y es mejor haberse mantenido alejado de aquellas personas, pero la mayoría de veces los juicios no se corresponden con la realidad, ya que una persona a la que le guste jugar con la gente no llevará un cartel en la cabeza, ni otros muchos casos.
Hasta aquí la publicación de esta semana, a disfrutar.
domingo, 9 de agosto de 2015
Pedazos de mi. Alma
Cuando llegó la vio en el suelo hecha pedazos, no sabia que sentir ni cómo arreglarlo. Puede que nunca más la volviera a sentir, puede que se hubiera acabado todo para siempre. No sabía claramente cual de todos los malos momentos que últimamente habían tenido lugar había hecho que se rompiera su vínculo o simplemente que ella misma se deshiciera.
Hace unos días ya había sentido algo así, pero nunca había sido tan fuerte, era como si una parte de sí misma desapareciera, su alma.
Sus ojos se destrozaban cada vez más brotando de ellos lágrimas constantes, era como si otra persona los controlara, no podía pararlos.
Se agachó y toco uno de los pedazos de ella, estaban fríos, parecía metal, no podía sentir nada, intentó unir unos cuantos trozos, pero igual que los juntaba se caían sin encajar.
-¿Así es como se muere la gente?- Pensó, pero sabía que no había llegado la hora para ella, en realidad todo se solucionaría como siempre ¿no? O eso quería creer.
Empezó a verse a si misma de pequeña correteando por delante de ella, la intentó tocar, le habló, pero era como un fantasma que no sentía nada.
-¿Todo esto era el final? Nunca se había sentido así.
Le dolía todo, como si al haber desprendido su alma esta se descosiera produciéndole cicatrices por todo el cuerpo en las que alguien estuviera metiendo agujas para hacerlas sangrar. Para comprobarlo empezó a quitarse la camiseta y observo todo su cuerpo, todo parecía normal, pero tenia demasiado frío, era verano y aunque estuviera sin camiseta tendría que seguir teniendo calor, en vez de eso unos escalofríos recorrieron su cuerpo.
Seguían brotando lágrimas de sus ojos, seguía sin poder sentir nada, se había quedado sin alma ¿Podría vivir así? No tenía respuestas para ninguna de sus preguntas.
Algunos de esos pequeños trozos empezaron a brillar y después desaparecían, intentó cogerlos, pero era imposible, se esfumaban y al segundo no había ni rastro de ellos, como si su alma no hubiera existido nunca y desde ese momento empezó a ver la vida desde otra perspectiva, todo era diferente, borroso, y después se fue borrando todo hasta no ver nada. ¿Era el final?
sábado, 6 de junio de 2015
REFLEXIONES IMPROVISADAS 9
Ya se que este tema es intenso y por ello hablare de lo que crea más importante e intentaré explicar lo que quiero decir.
Por la vida de cada uno de nosotros pasa mucha gente, unos adecuados y otros que no lo son, debemos distinguir entre estos dos grupos de personas, pero no es fácil, ya que si no hemos conocido todos los tipos de personas que existen es difícil saber como es la gente a primera vista.
A parte siempre tendemos a juzgar a las personas a primera vista sin conocerlos y por ello se hace más difícil saber como son en realidad y si esperamos que alguien sea de una forma y luego no es así todo es mas complicado.
Por todo esto conviene no realizar juicios ni esperar grandes cosas de la gente que todavía no conoces de verdad, porque cada uno guarda su secreto unos más oscuros que otros, pero todos los tenemos, son nuestras debilidades, aquello que no queremos que la gente vea ni sepa de nosotros, y por ello podemos hacer que sea más difícil reconocer como somos en realidad.
Siempre se ha dicho que hay que rodearse de la gente buena, los que vienen para quedarse, pero como todo es fácil decirlo, pero a la hora de la verdad cuesta mucho saber si han venido para ayudar.
Yo he tenido varias experiencias malas en mi vida con gente despreciable en la que al principio confías y te la clavan por la espalda, pero no me arrepiento de mis actuaciones, ya que me sirvió para aprender, para ser más fuerte, porque es verdad que lo que no te mata te hace más fuerte. En mi caso es así. Aunque algunos momentos de nuestra vida no nos gusten es nuestra vida y no debemos tirarla por la borda, simplemente tenemos que intentar acabar con esos momentos cuanto antes, aprender de los errores es de sabios, o eso dicen.
En conclusión quiero decir que se de primera mano que no es fácil deshacerse de los malos momentos, pero hay que intentarlo, hay que despojarse de las personas que nos hacen daño, porque después lo agradeceremos, pero nunca te arrepientas de momentos de tu vida, porque por muy malos que hayan sido te habrán servido para aprender que viene para quedase y quien para herirte.